EE. UU. Lanza tercer ataque a presuntas narco-embarcaciones venezolanas

Estados Unidos ejecutó este martes un tercer ataque contra posiciones estratégicas en territorio venezolano, intensificando así la crisis diplomática y militar entre ambos países. El hecho ocurre apenas semanas después de las dos ofensivas previas, que ya habían generado rechazo internacional y advertencias sobre una posible escalada en Sudamérica.

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De acuerdo con fuentes oficiales de la Casa Blanca, la acción estuvo dirigida contra instalaciones presuntamente vinculadas a operaciones militares de Caracas que, según Washington, representaban una amenaza directa para la seguridad hemisférica. Sin embargo, el gobierno venezolano calificó el ataque como una agresión injustificada y una violación flagrante de su soberanía.

El presidente Nicolás Maduro condenó enérgicamente la ofensiva y convocó de urgencia a su gabinete de defensa, al tiempo que llamó a la comunidad internacional a pronunciarse contra lo que denominó un “acto de imperialismo militar”. En contraste, el Departamento de Estado defendió la operación como un “golpe preventivo” y aseguró que continuará actuando “cuando sea necesario”.

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La Organización de Estados Americanos (OEA) y la ONU han expresado su preocupación por la escalada bélica, advirtiendo que el conflicto podría desestabilizar no solo a Venezuela, sino también a los países vecinos. Diversas naciones latinoamericanas han pedido moderación y la búsqueda de una salida diplomática antes de que se desate una confrontación de mayores dimensiones.

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Mientras tanto, en las principales ciudades venezolanas se registraron manifestaciones de rechazo al ataque, con miles de ciudadanos denunciando la injerencia extranjera y exigiendo respeto a la soberanía nacional. Analistas internacionales coinciden en que este tercer ataque marca un punto de inflexión en las relaciones entre Caracas y Washington, abriendo un escenario incierto para la región.